Cautivos están vuestros progenitores
Hombres y Mujeres, privados de libertad, Mientras
Inocentes manitos se deleitan en el color
Sembrando surcos en varias direcciones, quizás
Plasmando dolor; decoran el lienzo tendido sobre el piso,
Ilustran sumidos en esa soledad obligada.
Transmiten su pesar, por falta de cariño y
Amor de quienes tienen su propia sangre, prisioneros del
Sistema social reinante en la patria mexicana.
Destellos de alegrías, muestras sus rostros que
Entristecidos permanecen en su su quehacer cotidiano.
Familiares y adultos observan el acto. Mientras los
Amigos, comparten emociones y pinceles
Nunca como hoy, sus padres anhelan la libertad, y juntos
Tomados de las manos, inician la ronda del
Adios. Justo cuando el reloj marca medio día en punto.
Suena la Sirena, anunciando que la visita ha culminado
Injusta la vida de estos artesanos de sueños. Eperando
Amanecer en familia. Pensamiento inocente y noble.