Maria del Carmen Tenllado.

Málaga en la Andalucía de mi espiritualidad mediterranea,
Abrigó tu cuna, y en tu crecimiento, nació la poesía.
Recorro el mapa del sur de España, y el sentimiento me
Interna en su agobiante calor de verano, que nutre mis fuerzas
Atesorando de tu energía , el combustible de mi existir.

Del manantial fecundo de viñedos y olivos, atrevida y osada

Corres al encuentro, sin previa cita. Sembrando letras
Anidando en vuestro corazón los verbos cargados de erotismo
Regalando tu juventud que martiriza en la distancia.
Me detengo en la mirada celestial que impregnan tus ojos.
Encrucigada obligada, me invita a la reflexión y pido silencio.
No entiendes, huyes a la soledad, y abanicas mis suspiros.

Tienes la fogosidad en tus manos, y la sed de tus besos se
Extravían en esta virtualidad que crucifica mi existir.
No existe impedimento para huir de tu entrega...
Libertad ya no quiero, si te quedas en la agonía de mi vivir,
Lejano, más la espiritualidad que reina en mi ser, nutre este
Amor que precipitado corre por doquier, asomando la vista
Desde la nevada Granada, hacia el terruño escandinavo.
Ofreciendo tu genialidad y  tu inocencia genuina de arrebatos.

nelson@urra.nu 

Suecia:  mayo 09-2013